Al dedicarte al cuidado del hogar, seguramente ya sabrás que hay tareas domésticas que deben hacerse de forma diaria, pero que de algunas puedes ocuparte solo una vez a la semana. Pero, ¿sabes que tareas están dentro de cada grupo para saber con qué frecuencia debes limpiarlas? Vamos a verlo en esta entrada.
En tu jornada laboral has de ocuparte de un gran número de tareas, de modo que organizarte es un punto fundamental para el correcto desarrollo de esas tareas. Por eso, lo primero que debes hacer es conocer cuáles son las tareas que has de hacer cada día y cuáles de estas puedes espaciar un poco más. De hecho, algunas incluso puedes hacerlas cada varios meses.
Pero, ¿cuáles son las tareas que debemos realizar diariamente? En este grupo incluiremos tareas como por ejemplo barrer el suelo, hacer la cama, fregar los platos y limpiar la encimera.
También conviene desinfectar, aunque sea de forma superficial, ciertas zonas del baño y de la cocina, ya que son partes de la casa en las que se acumulan muchas bacterias.
Semanalmente deberás ocuparte de cosas cuyo buen estado dura un poco más de tiempo que las tareas indicadas anteriormente. ¿Por ejemplo? En este grupo pueden entrar tareas como por ejemplo; cambiar las sábanas, limpiar los espejos y las superficies de cristal, quitar el polvo en profundidad y pasar la aspiradora para conseguir un resultado más pulido que con la escoba. También una vez a la semana, deberías limpiar en profundidad zonas como la cocina y el baño, aunque diariamente vayas haciéndolo de manera superficial, una limpieza en profundidad semanalmente es ideal para zonas como estas.
Por último tienes tareas que pueden espaciarse todavía más, como limpiar las persianas y lavar las cortinas. Esto se haría cada varios meses.
Si aglutinas todas las tareas programadas semanalmente en un día, sumándolas a las tareas diarias, será imposible que puedas asumir todo el trabajo.
Por eso, te recomendamos que hagas una lista organizando todas las tareas sabiendo ya que zonas requieren de una limpieza diaria y cuales semanal o mensual y distribuyas estas tareas entre los diferentes días de la semana.
Ya has visto la importancia de establecer prioridades en las tareas domésticas. Apunta estos consejos y lo notarás en los resultados.
Estos son los principales puntos que has de considerar para diferenciar las tareas domésticas según su frecuencia de limpieza. Ahora que ya sabes qué debes tener en cuenta sobre qué zonas limpiar diaria, semanal o mensualmente tendrás más claro cómo organizar tus tareas domésticas.
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