Cómo mantener limpio el lavavajillas

Con la incorporación de los lavavajillas en gran cantidad de hogares, mantener la cocina en orden se ha simplificado mucho para asistentas del hogar, pero no debemos olvidar que también hay que limpiar el lavavajillas.

Estamos realmente acostumbrados a ver el interior de este electrodoméstico, y a ponerlo y quitarlo a diario, por lo que no nos damos cuenta de si realmente está limpio. Si nos paramos unos segundos ante él y miramos su interior, podremos darnos cuenta de que no está como los primeros días.

Otro gran indicador de que ya nos va tocando darle un buen repaso puede ser su olor. Tras un rato cerrado lo abriremos y percibiremos una mezcla de olores, como a comida y a desagüe.

El mantenimiento y la limpieza del lavavajillas es realmente sencillo. Para prevenir que se ensucie demasiado, un buen truco es enjuagar los platos antes de meterlos. Así lograremos eliminar los restos de comida que quedarían acumulados en el filtro durante el lavado. También podemos utilizar productos ambientadores y desinfectantes que prolongarán la vida del aparato. Además, cuidaremos de dejar la puerta abierta tras cada lavado al menos media hora, para evitar así que se acumule demasiada humedad en los rincones. Y desde luego, siempre debemos asegurarnos de que los niveles de sal son correctos, para reducir así la acumulación de cal

A la hora de limpiarlo, debemos atender a los puntos clave, como son el filtro, las bandejas y las aspas. El filtro suele ser muy sencillo de desmontar, y puede quedar realmente limpio con tan solo jabón de lavar los platos. Para las bandejas y las aspas es posible que tengamos que ser más cuidadosos, pues no son tan sencillos de desmontar. Nos haremos servir de un trapo suave (para no dañar la superficie) con jabón. También aprovecharemos para dar un buen repaso al cajetín del detergente. Con limpiar el lavavajillas de esta manera dos o tres veces al año, el electrodoméstico se mantendrá mucho más limpio.

También es muy recomendable, al menos una vez al año, adquirir un producto limpiamáquinas y hacer con él un lavado en vacío. Estos productos están ideados para recorrer todo el circuito de agua y desincrustar cualquier resto de comida o cal que pudiera quedar.

Siguiendo estos sencillos consejos, lograremos limpiar los lavavajillas a fondo sin mucho esfuerzo. A menudo, las asistentas consiguen así que los platos y vasos queden limpios, sin marcas de suciedad ni cal. Todos en el hogar lo notarán.